Colchones antiescaras para camas articuladas.
Todos los colchones se venden promocionando su confort y capacidad de mejorar tu descanso, pero la mayoría no son aptos para las personas que pasan largos periodos de tiempo echados, con movilidad reducida o nula.
Descansar sobre un colchón confortable y que se adapte a nuestra fisonomía es importante para nuestra salud y estado de ánimo. Pero si, además, es para alguien que tiene que estar largas horas en la cama, se convierte en algo esencial.
Los colchones antiescaras han sido creados específicamente para ese tipo de personas: su hechura, disposición y movimiento impulsan la buena circulación sanguínea y la distribución ecuánime e inteligente de la presión sobre el cuerpo acostado para evitar y ayudar a curar las escaras.
A continuación os hablamos sobre las recomendaciones a la hora de elegir colchón antiescaras
¿Qué es una escara?
También conocidas como úlceras por presión y úlceras de decúbito. Son lesiones en la piel y el tejido inferior que resultan de una presión prolongada sobre la piel. Se caracterizan por la aparición de una herida o incluso costra, como resultado de una quemadura, una gangrena o necrosis de origen infeccioso, químico o de cualquier otro tipo.
En la mayoría de los casos, se manifiestan en la piel que recubre las partes óseas del cuerpo, como talones, tobillos, caderas y coxis que están en contacto con otras superficies (colchón, cojín, etc. )o sufren de presión más prolongada.
Las escaras se clasifican de acuerdo a la profundidad de afectación de los tejidos de la piel:
- Nivel de úlcera 1
El primer grado es del tipo de úlcera menos perceptible. La zona de la piel afectada se ve pálida y rojiza en pacientes con la piel más blanca y amoratada o azulada en pacientes con la piel más oscura. En una úlcera por presión de primer grado la piel permanece intacta, pero puede doler, picar y resultar o bien tibia y mullida o bien dura al tacto.
- Nivel de úlcera 2
Las de segundo grado, la epidermis (superficie externa de la piel) o la dermis (parte interna de la piel) resulta dañada, lo que provoca una pérdida de tejido. Su apariencia es como la de una herida abierta o una ampolla.
- Nivel de úlcera 3
Las ulceras de tercer grado, comienza la pérdida de piel, se produce en todo el grosor de la misma y el tejido inferior también resulta dañado, sin llegar a dañar los músculos o el hueso.
Tiene el aspecto de una herida profunda con forma de hueco.
- Nivel de úlcera 4
Las escaras de cuarto grado son el tipo más grave, en el la piel está peligrosamente dañada y el tejido más próximo se muere creándose así una necrosis, en estos casos el músculo subyacente o el hueso, pueden resultar dañados.
Las personas con escaras de cuarto grado poseen un alto riesgo de desarrollar infecciones graves.
¿Qué es un colchón antiescaras?
Un colchón antiescaras es una superficie especial que reparte el peso del cuerpo, aplacando la presión y evitando así que aparezcan las escaras, las heridas que salen en la piel debido a la inmovilidad.
Podemos encontrar diferentes colchones antiescaras que se adaptan a diferentes preferencias y necesidades.
Después de evaluar decenas de colchones, teniendo en cuenta sus características, los más recomendables, que crean beneficios y con mejores resultados, son los colchones de aire, que en la mayoría de los casos se deben de posicionar sobre otro tipo de colchones.
Esta suele ser la opción más elegida y la que consigue los mejores resultados ya que estos colchones son confeccionados utilizando un material que se denomina cloruro de polivinilo más conocido como PVC.
En su interior, dispone de unos pequeños conductos, llamados celdas o celdillas, que se pueden hinchar utilizando un compresor de aire, de manera alternativa y mediante corriente eléctrica; además, nuestros colchones incluyen este compresor para que no tengan que comprarlo.
A través de ellos la idea es conseguir disminuir la presión causada en determinadas zonas del organismo, intentando con ello incentivar el flujo sanguíneo.
Preferentemente, además del cochón, es mejor tener una cama articulada a ser posible eléctrica para garantizar el bienestar del enfermo, ya que con ellas puedes facilitar los cambios de posiciones.
¿Cómo se usa un cubre colchón antiescaras?
Lo primero es leer las especificaciones propias de cada modelo, prestando mucha atención a los kilos máximos que soporta cada uno.
- El cubre colchones antiescaras debe colocarse sobre un colchón. Lo más conveniente es emplear un somier ortopédico.
- En sus extremos los colchones suelen tener un tipo de lengüetas que se introducen por debajo del colchón para que el cubre colchones no se mueva.
- Conecte los tubos a la colchoneta antiescaras y al compresor, asegurándote que no se han quedado escondidos o doblados debajo del colchón. encienda el motor y espere el tiempo indicado en el manual de instrucciones antes de tumbar al usuario encima.
- Le recomendamos que conecte el colchón directamente a un enchufe, no use alargadores. Así prolonga la vida útil del compresor.
- Puedes mantener el motor del colchón encendido el tiempo que sea necesario.
- No infles el colchón antiescaras con el paciente encima.
¿Cómo se colocan estos colchones?
La instalación de este tipo de colchones es muy sencilla.
- En primer lugar, debe desplegar el colchón sobre la cama, asegurándolo con las solapas de ajuste.
- Fíjese en que los tubos de aire queden siempre a los pies de la cama.
- Posteriormente, usando los ganchos integrados, cuelgue de manera segura el compresor a los pies de la cama o en una superficie plana y lisa.
- Una vez realizado lo anterior conecte el tubo alimentador de aire a la salida de aire del colchón y a su vez al compresor, asegurándose de que los tubos no queden retorcidos.
- Conecte el compresor a la fuente de electricidad y enciéndalo, emitirá un suave sonido y la vibración del compresor mientras éste está hinchando el colchón.
- Debe esperar alrededor de 20 minutos hasta que el colchón se hinche completamente (aunque esto dependerá de cada tipo de colchón, compruebe las recomendaciones de uso del manual).
- Finalmente compruebe si el rango de presión es el adecuado, deslizando la mano a la altura de las nalgas del paciente, entre el colchón alternante y el colchón de la cama, debería haber un espacio libre de entre 2,5 y 4 cm aproximadamente.
¿Cuál es el funcionamiento de estos colchones?
Una vez instalado correctamente el colchón ya se puede usar cuando se necesite, siguiendo estos sencillos pasos:
- Active el botón de encendido, el compresor comenzará a expulsar aire hacia el colchón.
- Si desea aumentar la presión, gire el regulador en sentido de las agujas del reloj para aumentar la presión o, lo que es lo mismo, la dureza del colchón.
- Cada vez que se quiera hinchar el colchón es recomendable que mantenga el regulador de presión al máximo para que así el llenado sea más rápido.
- Cuando la persona lo vaya a utilizar se recomienda que se encienda unos 15-20 minutos antes de usarse.
¿Cómo limpiamos un colchón antiescaras?
- Antes de limpiar, asegúrese de que el colchón está desenchufado de la corriente eléctrica
- Para proceder a limpiar su colchón antiescaras, primero prepare un cubo con abundante agua y un poco de jabón neutro o un detergente apto para PVC.
- Nunca utilice productos abrasivos.
- Prepare otro barreño con agua tibia para ir aclarando las bayetas y el colchón a medida que lo vayas limpiando.
- Moje el trapo y escúrrelo bien, después páselo por el colchón frotando enérgicamente, pero con cuidado de no dañar las fibras del tejido. Repita la operación varias veces hasta estar seguro de que el producto llega a todas partes.
- Para terminar, utilice la otra bayeta humedecida en agua. Pásela y aclare en repetidas ocasiones, retirando la mayoría del producto aplicado anteriormente. Después, deja secar en un lugar muy bien ventilado, hasta que quede completamente seco. No exponga a la luz solar directamente y no use secadora.
Y recuerde con colchones antiescaras, los pacientes se encuentran más cómodos y descansan mejor, aumentan su calidad de vida y evitan acrecentar otras enfermedades.
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